Un día típico para un hematólogo puede incluir diversas actividades , como responder interconsultas de los diferentes servicios que piden la opinión experta para el manejo de afecciones benignas o trastornos de la coagulación , realizar diversos procedimientos relacionados a la especialidad tanto en niños como adultos, aspirado de médula ósea, biopsias de hueso, colocación de quimioterapias intratecales a través de punciones lumbares tanto de manera ambulatoria en sala de procedimientos como en sala de operaciones para los menores, además de la interpretación de láminas periféricas y hemogramas ,al contar con servicio de hospitalización también se incluye el pase de visita en los servicios de hematología de adultos y niños que siguen un tratamiento de quimioterapia, revisar sus esquemas, , dar soporte transfusional, corregir trastornos hidroelectrolíticos, manejar las diversas complicaciones ,recetar medicamentos, discutir las opciones de tratamiento con las familias.

Coordinar con otros profesionales médicos para el diagnóstico, lidiar con emergencias hematológicas y educar a los pacientes y sus padres sobre la enfermedad de sus hijos y cómo ayudar en el proceso de tratamiento. Los hematólogos pueden trabajar durante el horario comercial habitual u otros turnos, según las necesidades de su servicio.

Un hematólogo es un médico que maneja la salud física, conductual y mental de adultos y niños con afecciones en la sangre. Un hematólogo está capacitado para diagnosticar y tratar una amplia gama de enfermedades, desde problemas de salud menores afecciones benignas hasta enfermedades graves, malignas como las leucemias, mielomas y linfomas. También debemos tener fuertes habilidades interpersonales, ya que la mayor parte de su interacción es a menudo con adultos y niños enfermos de afecciones hematooncológicas Esta puede ser una posición de mucho estrés, por lo que la capacidad de trabajar en situaciones de alto estrés y manejar problemas y resultados inesperados.